YOETA

23 diciembre, 2010

SOLEDAD I (con gatito y silencio)


Ella vuelve
el viento mágico de flores
con su bici. Si la pienso
sobre rayos
a lo lejos, surge el ángel
de su nombre
que la sigue y si la alcanza
el silencio es el motor
de su cinético equilibrio
de su vibrante velocidad,

o sea: un inmenso
gatito-motor
que ronronea
del grande de una estrella.

SOLEDAD II (Con perrito y estrellas)

Se cubrieron de besos y se abrazaron largamente hasta quedar imantados de luna. Cuando ella se iba se le pegaban (a ella y a la bici) los papeles y las hojas del camino. Un perro de flores y pastito la siguió unas cuadras, pero el can primaveral se deshizo al primer ladrido (ladró porque no supo de qué otra forma saludar) y lo que se oyó fue un bostezo perfumado.
No llegó a volar o a saltar tan alto aunque era suficiente su encantada velocidad. Tal vez hubiera bastado una mínima rampa precisa. Con un envión así de mimoso, en una de esas cruzaba el río. Un flotante sendero de estrellas surgiría bajo sus ruedas para facilitar el milagro.
Pero no, ya entra a su casa y duerme y sueña. Cruza el río, sí; pero llega al otro lado en llantas y tiene que volver a pie por el puente con el cuadro a la rastra y las cámaras llenas de esquirlas plateadas. Así y todo, el niño de la orilla (o el niño asombrado que la orilla es) nunca olvida un mágico cruce.
Una estela suave, del cielo y del agua, dejó su marca. Un signo de alegría en el cuerpo y en la arena como una línea de tibieza permanente.

20 diciembre, 2010

DIÁLOGO DE ABRIL*

I
Con sólo mirar
el río ya tiene silencio.

II

Por más que la ciudad derrama
sus ruidos, el río tiene
un silencio inmarcesible, su secreto
transparente, su carne** de ángel.

Entonces si ella*** abraza
el árbol, el ave

se funde al paisaje
como a un espejo
como a una música.




* O Diálogo de castores.
** Esta palabra, utilizada así, pertenece a uno de los castores.
*** Elija: ella o Abril.

29 agosto, 2010

EL VIENTO

un árbol de aire,
para irse va creciéndose
son ramas rapidísimas
y dejan
la raíz de su estela.


de vegetal transparente
un ángel, de vibración mineral
en las hojas de luz.

dinámico fantasma, es todo
nacerse y fugarse


(de río raíz)

02 agosto, 2010

MATOTALIPSIS

 Todos mueren por el amor
de Matota y la Rusa.
Todos van hacia la muerte más
cuando se acercan. Morirán.


Las camas, las veredas
se acantilan de un abrazo

y más vale aún
dormir
o no
andar
e
n bici con rueditas.
Y sino responder
con otro polvo,
un sol más fuerte.
Ese perro se asfixia
con un beso tan largo,
sólo un cuello de jirafa
lo podría salvar.

Están matando al mundo,
lo están matoteando.


Un vial
toqueteo cambia
el semáforo y
choca

el cura con la cana
en su fitito, mejor
imposible.


Nuevo abrazo
nuevo beso
y se traga
la vieja de la bici
el caballo. De largo
hacia la zanja,
hacia la sombra.


La ramaenredadera
cubrequiebra edificios
vacíos.
Matota
y la Rusa, contra
campaña
del desierto.

Crean
o van hacia
el paraíso
sin vergüenza.
No va a
quedar ni uno.
Sólo
los que anden en bolas
por la calle.




de La Rusa (Matota II)

14 mayo, 2010

RUSOMBRA

Cuando se acerca la Rusa
tan linda se traga
los perros la sombra de Matota
y se chupa los insectos y los pájaros.

Siente su barba, papelitos
en la regla
caliente de fregar la lana, el ciego imán,
y se tuerce la luz
se arracima como en lluvia.

O que la Rusa lo deje
de mirar
fuerte o que la sombra
se coma de una vez
por todas una estrella.


II (MATOMBRA)

Pero la sombra de la Rusa no traga
si lo mira, escupe flores
y conejos
de Cortázar o pelotas

en el área
bien servidas
para una palomita
o se funden al pecho
y dejan
el corazón recaliente.




16 marzo, 2010

PLAZOLETA DE LOS AMIGOS

Yo siempre pensé de chico
cuando jugaba con Fernando entre sus pies:

esa escultura de los hombres
abrazados eran dos
boxeadores extenuados
en los últimos asaltos.

Tanta amistad,
tanto empapado cariño
sólo es
para evitar la distancia del sopapo.


(de Podría haber sido un haiku)


17 febrero, 2010

MATOTA JARDINCITO ALREDEDOR

Si la Rusa dura mucho
cuando mira a todo o nada
o piensa en dulce-leche
con viento de vainilla
helado de limón,
Matota le genera
un jardincito alrededor
esté donde esté.

Y termina a veces
pero igual se queda
para que el Mato no pare.
Matota rapidísimo del aire
castor y colibrí.

Se dura la Rusa
en el molde de los ojos
tentada en su instantánea
fe de cielo,
o con la aguja de la luz
en el punto de fuga
para ensayar una muerte lenta
y de parada.

Pero llega en lo mejor una vieja
católica quizás y exclama:

¡¿Cómo que caracol mariposa?!
¡¿Cómo que chancho-pajarito?!
¡Qué degenerado!

Y toda la ciudad pecosa
de microparaísos,
edénica viruela,
pequeños circulitos plazoleta
de Rusa central ya ausente,
Matota pararrusíaco.

Toda la piel de la ciudad
con antojos de la Rusa.

Pecas de pasto,
lunares del ocio
extático y gringo.

04 febrero, 2010

CHAMARRUSA

Se bailan con la Rusa hasta la orilla
se aletean
un gigante chamamé,
un ancho chamamé del horizonte
che, trompo arazá
ranita de la lluvia que lubrica
para el ascenso el cielo
tristeza psicodélica y limpia
del monte líquido
cetácea memoria pulmonar
del mar en el aire

Se bailan
se levantan como gallos
el polvo
cambian picos
con la sangre
del vino y del pollito en el ojo

La risa se acelera en los pies
al borde del esguince
y en las uñas la luna
se enloquece y se descalza

suben los acordes botonados
(las ranas terminaron
de aceitar el aire)
y brota la Luz Mala en la Cruz
constelación

cae
sobre el campo envuelve
su locura los caballos
envuelve
a chamatota y chamarusa
bailarinos en su cresta

y se van sobre el río,
envión de pluma
envión de plasma,
supernova chamamé,

se hunden al pisar las estrellas,
al hacer patito
sobre el cielo movedizo.


04 enero, 2010

LA PRINCESA DEL CASTILLO LITORAL

1
Si un beso de la princesa
del Castillo Litoral
toca la luna,
la imanta
y se le pegan las estrellas.

2
Por culpa de los besos que lanza
la princesa del Castillo
los pájaros valientes
se chocan la luna.

3
La estrella o el pez que tragó
un beso del Castillo Litoral
ahora es un pulpo nebuloso.

4
Si llegás a respirar sin querer
uno de los besos del Castillo
te pueden crecer las alas
y unas orejas enormes.

5
¡Ay si te llega a entrar por la oreja
un beso que viene del Castillo!

6
Cuando lanza besos al aire
la princesa del Castillo Litoral
comienzan las estrellas
a formar espantapájaros
para cuidar a la luna.

Bio-bibliografía

Martín Pucheta nació el 18 julio del ‘81 en Gualeguaychú, Entre Ríos, Argentina.
Publicó Superjardín (En danza, 2010) y en formato micro Matota (La Gota, 2010) y Aerolinda (La Gota, 2017).
Ha hecho circular en formatos artesanales los inéditos Sonajero de misterio: los tomuer (2009) -con Nicolás Cambon-, río raíz (2012), Podría haber sido un haiku (2014), Tocar de oído (2015) y Estudios del Cambio (2017).
En este 2020, la editorial sanjuanina elandamio acaba de editar, reunidos y ampliados, río raíz y podría haber sido un haiku.

Integra las siguientes antologías de poetas:Última poesía argentina (En danza, 2008), Felicidades también (18 poetas) (2005), Poemas con famosos (Ananga ranga, 2010), Palimpsesto-parrincesto, antología enfermiza (Ananga ranga, 2011), Hijo e pluma (Ananga ranga, 2014), La Plata Spoon River (Libros de la talita dorada, 2014), nº 1 Amor y n° 4 Plantas de la Colección “Prismática Argentina”(En danza, 2015 y 2017), Antología Federal de Poesía (Región Centro) del CFI (2018) y Antología Internacional “Contra molinos de viento-Poesía Fusión 2020” (edición virtual).

Participó del 24° Festival Internacional de Poesía, Rosario 2016. Participa del Encuentro Nacional Itinerante de Escritores (ENIE), del cual coordinó la organización de la 6° edición en Gualeguaychú (2013). Ha escrito letras para canciones de Juan Pablo Pérez y Cato Fandrich. Trabaja en escuelas secundarias como profesor de Lengua y literatura. Desde el 2007, coordina talleres literarios. Es responsable de la Biblioteca “Oblí Lantéc” del IOM2 (Instituto Oscar Masotta) de Gualeguaychú. Rockeó con la banda Leda lid entre 2004 y 2016 (vocalista). Compone canciones que ha presentado muchas veces con el nombre de Arboreal. Juega al fútbol desde chico. Es padre de Ariel y Fausto.